Nuevamente cambiaremos el horario con la llegada de la primavera porque, a pesar de las grandes polémicas técnicas sobre este tema, se mantiene la teoría de que se ahorra mucha energía eléctrica.
Con la llegada del otoño el 21 de septiembre, entramos en el horario de otoño/invierno para, al menos teóricamente, aprovechar más la luz del día. Existe mucha controversia sobre la conveniencia de estos cambios de horario.